Vuélvete experto de un clásico español, el jamón serrano y el ibérico
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Dentro de la gastronomía mediterránea, los jamones curados son un ícono de la cultura española. Durante mucho tiempo, comerlo era sinónimo de nobleza y poder adquisitivo. Hoy en día está presente en muchos platillos. Conoce la diferencia entre el jamón serrano y el ibérico y sumérgete en su sabor.
DIFERENCIAS ENTRE EL JAMÓN SERRANO Y EL IBÉRICO
Su elaboración va mucho más allá del finísimo corte, empieza desde la raza, los genes, características y cuidado del cerdo, hasta la artesanal forma de curarlo. Probablemente los has probado y los has disfrutado, pero aquí te damos algunos consejos para distinguir perfectamente un jamón ibérico de un serrano.
Origen
En primer lugar, el cerdo del que proviene el jamón ibérico son razas endémicas de esta península y sólo se pueden encontrar en España. El jamón serrano, por su parte, proviene de un cerdo de raza blanca que se puede encontrar en otros países.
Color
Por otro lado, el jamón ibérico tiene un color más oscuro, intenso y brilloso que el jamón serrano, que es más rosáceo y opaco.
Olor
Además, el jamón ibérico tiene un olor más intenso que el del jamón serrano.
Sabor
Un buen jamón ibérico tiene un sabor intenso y es más jugoso. El jamón serrano es menos jugoso y más salado
Textura
El jamón ibérico es más rugoso y la mayor presencia de grasa hace que se puedan hundir los dedos en el jamón, a diferencia del serrano, que al ser más seco su textura es menos suave.
Propiedades
A pesar de que el jamón ibérico tiene más grasa, es más nutritivo, ya que contiene mayor cantidad de proteínas buenas.
Tipos
Los jamones se clasifican respecto a su procedencia, crianza y alimentación. Un ejemplo de esto en el jamón ibérico es el de bellota (que en sus tres últimos meses de vida estuvieron libres en el campo, alimentándose de bellotas en la época de Montanera, llegando incluso a doblar su peso), jamón ibérico de cebo de campo (fueron libres los últimos tres meses de vida y se alimentaron de cereales y otros recursos naturales del campo) y jamón ibérico de cebo (toda su vida se alimentaron de cereales).
Según datos de la Oficina Económica y Comercial de la Embajada de España en México, el 80% del consumo de jamón curado en nuestro país se consume en la Ciudad de México y el resto en Puebla, Veracruz, Guadalajara y Monterrey.
DISFRÚTALO EN TUS CELEBRACIONES
En junio y septiembre, las ventas de jamón serrano e ibérico normalmente suben hasta un 20% por el Día del Padre y las fiestas patrias, aunque otra temporada de gran importancia es la Navidad y el Fin de Año, fechas en las que el producto eleva sus ventas hasta en un 100%.
¿DÓNDE ENCONTRARLO?
En México se puede encontrar este tipo de embutido en muchos lugares, desde sitios muy populares, como el Mercado de San Juan hasta los muy exclusivos, como el restaurante Enrique Tomás, que recientemente abrió sus puertas a una más de sus sucursales en el país, en Plaza Carso, Polanco, para ofrecer no sólo el delicioso jamón ibérico genuino, sino también quesos, vinos y otras delicias. ¡Te invitamos a visitarlo!
Por Dayana Sanjuán
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