¿Qué relación existe entre nuestro planeta y nuestro cuerpo?
Todo lo que pasa en nuestro entorno nos afecta. De hecho, te sorprenderías de conocer la analogía tan precisa que existe entre nuestro planeta y nuestro cuerpo. Descúbrela aquí.
EL PLANETA Y TÚ
¿Qué pasaría si, de ahora en adelante, pensaras que tú y el planeta son uno? ¿Que cualquier decisión, pensamiento o acción te afecta a ti y al mundo por igual?
Pues, ¿sabes? Así es. Todo lo que pasa en nuestro planeta nos afecta. Todo tu consumo afecta a tu cuerpo y al planeta, ya sea en positivo o negativo, todo tiene una repercusión.
NUESTRO PLANETA Y NUESTRO CUERPO
Las energías fósiles, la ganadería, la tala de selvas y bosques, la generación de basura y plástico que invade los océanos… fue creada por el hombre. Que ha sido un gran creador pero también un gran destructor.
Las compras de tus alimentos y tu consumo generan basura y contaminantes. Y a la vez, generan un daño en tu organismo. ¿Cómo es eso? Pues es así:
EL DAÑO A TU CUERPO Y A TU PLANETA
En primer lugar, vas al supermercado y caminas por los pasillos, comprando en automático, sin la consciencia de lo que contiene cada producto y de cómo viene empacado. Sin leer la etiqueta.
Si lo hicieras, te darías cuenta de que están llenos de azúcar, conservadores, colorantes, aditivos y que por lo tanto su consumo excesivo a la larga puede ser factor del deterioro de tu salud.
CÓMO AFECTA A TU CUERPO CADA PRODUCTO
Me refiero a tu funcionalidad en los años venideros, en lo que afecta a tu sistema inmune, a tu tracto digestivo, a tu corazón a tus órganos en general y a tus capacidades físicas y cognitivas.
Entonces, ese consumo afecta a tu cuerpo y al planeta, ya que generas basura.
GANANCIAS DE LAS GRANDES CORPORACIONES
En consecuencia, cada vez que compras estos productos, le dices “Sí” a las grandes corporaciones de alimentos. Esas empresas que, para generar sus millonarias ganancias, no les preocupa la tala de bosques y selvas y el daño al medio ambiente en general.
Además, terminan con la fauna de mares y ríos. Le agregan más químicos a los productos para generar adicción y convertirnos en rehenes eternos de ellos. Así se provoca un círculo vicioso.
SE NECESITAN MÁS ACCIONES
Y no sólo es dejar de usar bolsas de plástico y popotes, es ir más allá. Revisar tu despensa, tu refrigerador, tus productos de baño. Todo está empacado en plástico:
Desde los quesos, la crema, el yogurt, el arroz, el frijol, el jamón, el pollo, carne, pescado, el pan, los cereales, la mantequilla. El shampoo, el jabón, las cremas, las navajas, el papel de baño, etc.
Un largo etcétera.
GENEREMOS CONSCIENCIA
Te invito a que generes consciencia de esta realidad y poco a poco buscando, investigando puedes ir haciendo cambios en tu consumo.
Piensa en que: Compro – daño – genero basura – soy cómplice del daño ecológico – lastimo mis células – así como se lastima cada ecosistema del planeta.
SI ME DAÑO, DAÑO A MI PLANETA
Suena terrible, pero así es: Me daño y daño. Me contamino y contamino. Como basura y genero basura. Me enfermo y enfermo. Imagina.
Mis pulmones son los árboles de las selvas y bosques. Mis venas son los ríos. Mi corazón son los polos glaciares. Y así cada parte de mi cuerpo es parte de este planeta.
HOY ES EL DÍA PARA EMPEZAR
Aun así, hay esperanza y hoy es el día para hacer consciencia. Cambio mi consumo a uno más natural y no procesado.
Al disminuir lo procesado, dejo de hacer más grande el negocio de la alimentación y de la farmacéutica.
OTRAS ACCIONES
Además, es necesario generar menos basura, separarla, reciclar, reusar, levantar la voz cuando mi gobernante pretenda cometer actos contra el medio ambiente. Antes de comprar algo, analizar si realmente lo necesito y cuánto tiempo lo usaré.
En cuanto al plástico, hay que decirle adiós. Consumir más local, directo del productor, más de la temporada. Optar por energías amigables. Y muchas más ideas que seguramente tú sabes o se te ocurrirán.
LA CRISIS CLIMÁTICA
“La crisis climática nos ofrece la oportunidad de experimentar lo que muy pocas generaciones en la historia han tenido, el privilegio de tener: una misión generacional”.
– Al Gore
Gracias por leerme.
Por Laura Rosado
LAVIDAESHOY
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