Cómo identificar si tienes hambre o antojos
Te has preguntado: ¿por qué tengo antojos todo el día? Estos pueden suceder a veces con más frecuencia y otras en una situación específica, como los previos a la menstruación.
Seguramente, en tu día existen muchas razones por las cuales crees que los antojos son normales y hay que satisfacerlos. Pero esto es erróneo.
El antojo es el deseo caprichoso y pasajero de algo, y la buena noticia es que puedes vencerlo. Tenerlos no es una señal de debilidad, al contrario, son mensajes que tu cuerpo te manda para que estés alerta. Así que debes poner atención en lo que te ocurre, y así puedas volver a tu balance interior.
El cuerpo humano está hecho a la perfección. Sabe cuándo tiene que dormir, despertar, comer e ir al baño. Además, mantiene una temperatura perfecta para mantenerte con vida y que todos tus órganos funcionen adecuadamente.
Es por esta razón que considero súper importante que te pongas como objetivo conocer a tu cuerpo y tu metabolismo. Te invito a prestar más atención a todas las señales sabias que tu organismo te manda.
Tu cuerpo te avisa a través de un antojo que necesitas balance y que algo está pasando. En ese momento tienes que analizar qué está sucediendo dentro de ti y comenzar a deconstruir esos antojos y malos hábitos.
Primero pregúntate: ¿qué es lo que mi cuerpo quiere y por qué? Por ejemplo, tomar mucho café es la señal que da tu cuerpo cuando necesita energía, probablemente necesites hidratarte mucho más. Beber un vaso de agua al despertar es un tip que siempre doy, ya que es mágico. Te sentirás renovada con los días y notarás los cambios en tu manera de consumir cafeína.
Otro ejemplo es cuando se te antoja una pizza, los deliciosos mac and cheese, o papas a la francesa; esto es porque te falta producir más serotonina, la hormona de la felicidad.
Mi recomendación es aumentar la ingesta de granos enteros y camote. También hacer más ejercicio te ayudará a producir esta hormona y empezarás a notar cómo ese antojo empieza a desvanecer.
Existen muchas otras causas como la falta de agua, el desequilibrio ying-yang, la estación del año las hormonas; la falta de nutrientes y las dietas extremas, pero la que más me impresiona es la emocional y es que sí.
La mayoría de las mujeres comen para sentirse mejor, o mejor dicho, para satisfacer alguna emoción mal atendida. Es muy común que te comas todo un bote de helado si te sientes triste, pedir una pizza si estás aburrida o si te da flojera cocinar.
Pedir cualquier opción poco saludable de Uber Eats después de un día de estrés en el trabajo. Esta acción satisface el momento, pero después ¿qué me dicen de la culpa?
Comer según tus emociones puede ser muy peligroso porque en muchas ocasiones se confunde con hambre real. No todo está perdido y hay maneras de identificarlo a tiempo.
El hambre emocional viene de repente, entras en estado de urgencia por algo. Al contario del hambre real que se forma gradualmente.
Cuando lo único que “necesitas” es una pizza o hamburguesa es claramente hambre emocional. Lo único que quieres es atascarte al comer, y si lo haces sin darte cuenta, lo aclara aún más.
Otra clave es cuando acabas de comer esos antojos y no estás satisfecha, necesitas más y más. Antes de comer a cualquier hora identifica si esa sensación de hambre viene de tus tripas o de tu cabeza, LITERAL.
Porque si viene de tu cabeza y tienes algo en mente súper específico; te lo imaginas y casi casi babeas, es puro antojo y ahí es cuando puedes tomar una mejor decisión.
Te reto a seguir los siguientes pasos para obtener una alimentación consciente:
- Empieza por comprar cosas saludables en el súper
- Evita pasar por los pasillos de dulces, chatarra y comida procesada
- Come con hambre y no con hambre extrema
- Empieza siempre con una porción pequeña
- Come consciente viendo los colores, texturas y sabores.
- Por último, come pequeños bocados, mastica lento y come aún más lento.
Recuerda siempre agradecer poder nutrir a tu cuerpo y darle lo mejor.
- *Para quitar antojos de azúcar, come vegetales dulces como betabel, zanahorias, camote, cebolla.
- *Come cada 3 horas para evitar que mueras de hambre y te atasques.
- *Toma un vaso de agua al despertar. Que sea lo primero que hagas.
- *Cierra los ojos por un minuto, respira y después analiza si es hambre o es antojo lo que tienes.
Los antojos son señales de algún desequilibrio en tu cuerpo.